viernes, 19 de mayo de 2017

La palabra y pensamiento cómo flujo vital. 20 mayo 2014.

Lo único que tenemos es el momento presente, la acción que realizamos en este momento en un aquí y en un ahora, en un espacio y tiempo, cuya justa medida es nuestra existencia. El pasado ya no existe, el futuro lo estamos construyendo y para que algo surja en este mundo, ya sea a través de las manos del hombre o de un ser creador, las cosas, las situaciones, o incluso para que la vida misma pueda existir. 

Es por ello que agradezco el poder vivir cada instante, el ser consciente, de lo que quizás no nos damos cuenta, pero el hecho mismo de movernos a nuestra voluntad, de cumplir nuestros deseos, de pensar y sentir, de estar, ya es decir mucho. No cualquiera puede darse ese lujo, inclusive la escritura misma es creación del artista, de su mente y sus manos puestas al servicio de su imaginación y de sus pensamientos, es algo que nadie puede arrebatarnos, tal cual los instantes y aun así no es necesario manifestar más que la voluntad del genio creador, de aquél que es capaz de hacer poesía con sus manos, de crear monumentos a la humanidad o de tan sólo vivir.

La vida en sí misma es arte, si vivimos el presente como lo único que tenemos en esta existencia, ya nada nos importarán los objetos materiales, la inmanencia, sino más bien la trascendencia de nuestro ser en el tiempo, de las palabras que dejamos atrás, de las ocasiones que vivimos con nuestra propia consciencia de existir, de nuestra fragilidad como seres humanos y con mayor razón nuestros recuerdos, las experiencias que hemos acumulado en el cuerpo. Aunque quizás nunca más se vuelvan a repetir.

No seamos pesimistas ni fatalistas, ya que si bien el tiempo no transcurre en vano, las circunstancias y personas que se cruzan por nuestra vida tampoco, el fin último al que podemos aspirar es a eternizar un momento, cuyo fin más paradigmático lo apreciamos a través de la ortografía, ese estatismo, que ya no es flujo vital, pues la vida es continúo movimiento, ir de un sitio a otro, movernos, sentir, expresarse, gritar, estar, vivir, es un accionar, es activar la pureza de espíritu y ser conscientes que no hay límites más que el que nos hemos autoimpuesto. La libertad del pensamiento está en las palabras, en el flujo vital de nuestra propia enunción.

Noche de vientos auguradores, 20/5/2014

Reseña biográfica José Chamorro, 2017.

Reseña biográfica del autor.: José Patricio Chamorro, nace en Talcahuano, región del Biobio, Chile el 23 de julio de 1991. Sin embargo sus primeros años los vivió en Santiago, para luego trasladarse a Chillán con su familia, donde cursó los estudios secundarios. En esta etapa tuvo su primera incursión en las letras a través de esbozos poéticos a sus 17 años, época también en la que escribió su primera novela “Flor de otoño”, inconclusa desde el año 2008 y que aún no ve la luz pública. En esos mismos años realiza cursos de verano en la Universidad de Chile, en psicología y literatura contemporánea, la que en su etapa universitaria lo acogerá como su alma mater, al ser su casa de estudios en la carrera de Lenguas Hispánicas. Estudió literatura durante cuatro años en dicha universidad, no obstante, su vocación por enseñar pudo mucho más y decidió volver a sus tierras en Chillán, donde terminó sus estudios de Licenciatura en educación el presente año y actualmente realiza su tesis sobre didáctica de la poesía para optar al título de Profesor de estado en Lenguaje y Comunicación.

Sus primeras publicaciones las hizo virtualmente a través de su blog que lleva por título: una-mirada-diferente.blogspot.com, que desde el 2008 a la fecha ya lleva unas 700 publicaciones de su autoría entre poesía, cuentos, ensayos, reflexiones, trabajos universitarios en relación a la literatura. También ha publicado en revistas virtuales, tales como: Revista Río Negro con dos cuentos: “El viaje” y “El regalo” y poesía,  a través de “Amaneció tarde aquella noche de pasión”. De igual manera ha publicado en las revistas culturales y de humanidades: “Revista Herencia” y críticas literarias en el “Simógrafo”, “Clepsidra”, “Acéfalos” y “Gacetas humanas”. Es miembro de Letras Kiltras.

 Después de todas estas vivencias peregrinas, sin las cuales no hubiese construido su andar, se atrevió a publicar su primer libro de poemas a sus 25 años, que lleva por título: “Arte poética: Los tormentos del escritor”. Que se precipita como un peregrinaje a través de un purgatorio de emociones, sentimientos, experiencias, sueños y procesos escriturales, para alcanzar la ansiada libertad.

En su etapa universitaria de Santiago conoció a diversos escritores e intelectuales con los cuales participó de foros, seminarios, charlas y encuentros culturales; lo que posteriormente tomaría más realce en su regreso a Chillán desde el año 2014 hasta la fecha, donde actualmente pertenece a cuatro grupos literarios de su localidad. El grupo Literario Ñuble, de vasta trayectoria; El grupo literario de la Universidad de Concepción, sede Chillán (de jóvenes universitarios), es fundador y Tallerista del Taller Literario y Cultural de la Universidad del Biobio desde el 2016 y pertenece igualmente al grupo Literario Benidorm-Chillán, que nace en España. Ha participado de encuentros literarios en San Carlos, Portezuelo, Coihueco y activamente en Chillán, siendo organizador en jornadas universitarias sobre poesía mapuche, poesía de mujeres y ha sido jurado de distintos concursos literarios de la provincia.


Reseña biográfica, presentación del libro “Arte poética: Los tormentos del escritor”, en la localidad de Lebu. 20 mayo 2017.

Mi arte poética

Arte poética (José Chamorro)

Escribo desde el alma que aniquila la razón y no de sin razones del corazón deseadas. Escribo porque nací poeta en una generación ...