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Mostrando entradas de abril 4, 2016

Vallejo y Girondo me susurran al oído esta noche

Vallejo y Girondo me susurran al oído esta noche, poesía es el eco que me acompaña Trilce se remece a vaivensa como poemas para leer en el tranvía Las chicas de flores se asoman en mi ventana Santiaguina, quizás es un vago sueño Los leo y los degluto como quién saborea un té de media noche Imágenes encuadernadas atiborran mis circunstancias La habitación se expande poética a una imaginación que desborda En la masmedula, menosmedula, pormedula, dividimedula de mis horizontes Me carcajeo a risotadas con sus juegos de palabras y sensuales alusiones Entre los versos que desnudan y la vanguardia que me inunda Entre la noche que discurre y el son afrocubano de ritmos humanos.

Nos miramos, auscultamos, se cierran los párpados, cae el telón, nos alejamos.

Me paro de pie frente al balcón, observo cauteloso el movimiento que se produce Me ves desde la lejanía de nuestros cuerpos, tu mirada se aproxima a mi sonrojado cuerpo   Siento que penetras con esa mirada profunda de amante generoso los poros de mi piel Me balanceo sobre mis pies y dejo ir a la deriva mis pensamientos, te deseo Pero intuitivamente me giro y te recuerdo, ya nos conocemos, eres mi complemento   Poetas que miran por la ventana del mundo y que claman a gritos un único deseo Vivir para contarlo, amar como quien ama un plenilunio de nostalgias Nos reconocemos en las caricias que no nos hemos dado, en la aquiescencia En la voluptuosidad de nuestros pechos que suspiran candorosos La sutil percepción de nuestra presencia es algo que nos cautiva, nos inmortaliza Como la fotografía de un instante, un segundo silente a vaivenes De lo que fuimos ayer y de lo que seres mañana, es un pensamiento sonoro Son el reflejo de mi silueta que se exp

Tengo una vida para amar

Tengo una vida para amar, un día para enamorarme, una hora para amarte   Un segundo para desearnos, un instante para las caricias que no nos hemos dado Te versifico en primavera como en otoño, te hago mía con las palabras Renuncio a mi fuego interno por una vida junto a tu pecho Me sonrojas mis pómulos como una frase de abril, me doblegas a voluntad Deseamos una vida juntos y te sumerges en mi sentir, ámame ahora Como un beso de atardecer, como una melodía diafragmática, un son de vivir Eres la razón de todos mis ayeres y la vibración de mis mañanas Cojo mi taza de té y me la sorbo como embebiéndome el alma. Pd: Poema escrito en abril del 2014.