Besar a un poeta es desenterrar escombros donde duermen sueños olvidados. Rozar sus labios es acariciar las estelas del pensamiento hecho deseo. Amar a un poeta es cultivar la memoria del cuerpo. Intimar con sus sensaciones es refrescar tus sentidos bajo el rumor del agua. Acielar la noche, escribir el día con el sol entre las manos. Perderse en los ojos de un poeta es reconocer el mar en sus bordes. Acariciar su alma, será la razón para saber que ya no hay marcha atrás. Ni jamás la hubo. José Patricio Chamorro J. 9 febrero 2019. Lima, Perú.
El monte parnaso es el olimpo de los simbolistas No soy iconoclasta ni falso adorador de egolatrías Enamórate de la soleada claridad del día Invierte el tiempo, traspasa generaciones Sumérgete en la torre de marfil, lee, escucha y escribe lo que ves No te calles, lo peor que puedes hacer es silenciarte Tan sólo entra y serás bienvenido en mi torre de marfil No preguntes por mi nombre, ya lo sabrás de antemano Sólo sé tú, sigue tu camino y me encontrarás, si me estás buscando.