Poesía noctámbula. marzo 06, 2011 Reedición: 5 diciembre 2017 Hoy la noche se me presenta cautivadora, tentadora Una musa cuyas sinuosas curvas me llama Exhala deseo y me fulmina con el hálito de su mirada Proclama a gritos furtivos que la posea Que la haga suspirar como el amante al que nunca podrá olvidar Aquél que la poseyó, que conquistó su alma Efluvios emanan fragancias aterciopeladas Delirios extenuantes en su lecho de ámbar -o- Es la noche amor apasionado, frenesí Reflexión propicia, pliegues de calma, tempestad Anhelante espera, impaciente mi estocada Un impulso impetuoso Que no cesará hasta pernoctar en el placer poético de una caricia Que le arrebate hasta el más escurridizo de los besos Y quede postrada en un rincón de mi cama.
El monte parnaso es el olimpo de los simbolistas No soy iconoclasta ni falso adorador de egolatrías Enamórate de la soleada claridad del día Invierte el tiempo, traspasa generaciones Sumérgete en la torre de marfil, lee, escucha y escribe lo que ves No te calles, lo peor que puedes hacer es silenciarte Tan sólo entra y serás bienvenido en mi torre de marfil No preguntes por mi nombre, ya lo sabrás de antemano Sólo sé tú, sigue tu camino y me encontrarás, si me estás buscando.