Este escrito no pretende ser biográfico, sin embargo, mucho de ello tiene y que al igual que aquellos que han caracterizado mi escritura, inevitablemente aludirá a vivencias de mi cotidiano existir. Hoy, 6 de julio del 2013, a mis casi entrados 22 años de vida, amo cada vez más la vida y las letras y como he escrito en más de una oportunidad, son el motor que me mueve a diario, a veces pierdo el rumbo de por qué escribo, las más de las veces, creo que lo hago por inercia o porque simplemente no lo puedo evitar, pues creo que el oficio de escritor es algo con lo que se nace y que se va forjando con el transcurrir del tiempo, quizás para algunos lo que uno desarrolle, puede ser considerado inocuo, inútil o que aquello ya fue pensado o escrito, mucho de ello he escuchado en mi breve existencia, que a veces me parece que ha sido excesiva, lo que quizás se deba a mi lucidez, pues cada día que me levanto intento vivirlo como si fuese el último, pero siempre logro despertar al día siguie
El monte parnaso es el olimpo de los simbolistas No soy iconoclasta ni falso adorador de egolatrías Enamórate de la soleada claridad del día Invierte el tiempo, traspasa generaciones Sumérgete en la torre de marfil, lee, escucha y escribe lo que ves No te calles, lo peor que puedes hacer es silenciarte Tan sólo entra y serás bienvenido en mi torre de marfil No preguntes por mi nombre, ya lo sabrás de antemano Sólo sé tú, sigue tu camino y me encontrarás, si me estás buscando.