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Mostrando entradas de 2011

La academia.

             Era un día cotidiano en Santiago de Chile, la gente se levantaba para ir a sus trabajos, daban las 6, 7 y 8 de la madrugada, las personas corrían de un lado hacia otro casi desorbitadas, subían y bajaban escaleras en el metro, se empujaban unas a otras y quedaban finalmente sumergidas en un cansancio general, apretujadas en apenas un metro cuadrado, topándose en ese cubículo con motor que es el metro. Así transcurrían las horas, monótonas rutinas muchas veces, asaltos a la orden del día, continuos gritos, accidentes, explotaciones laborales, sociales y así seguían cada vez más y no paraban, era un circulo vicioso que se prolongaba las 24 horas del día, por los 365 días del año. Sin embargo, la academia, la universidad, eran otra cosa, ahí la vida fluía distendidamente, las horas pasaban más lentas, habían espacios para las conversaciones, estudios y discusiones profundas, se hablaba de política, de cambios sociales, se gestaban ideas innovadoras en torno al conocimiento,

Síntesis trabajo literatura general I (Clásica-antigua), sobre estudios griegos. (PRE-grado.)

En líneas generales, cabe destacar que se referirá la trascendencia de la polis, surgida como institución democrática en el período clásico de la Grecia antigua, siglo V a.c, donde instituciones sociales como el oikos, quedarán subordinadas a ésta, comportándose ambas de un modo complementario. Por otro lado, en el discurso fúnebre de Pericles dirigido al pueblo ateniense, se perciben las características definitorias de esta polis, cuyo carácter o régimen es democrático , generándose tanto en el ámbito público como privado, un régimen isonómico, es decir, de igualdad ante la ley y, sobretodo, que no depende del poder (kratos), de unos pocos, sino de la mayoría, del pueblo (demos.) También es menester considerar que el compromiso alcanzado con la polis es sumamente relevante, ya que, por ejemplo, en el período micénico se consideraba a los reyes y héroes, como acreedores de una bella muerte, mientras que ahora, todo aquél que defienda en batalla a su polis, podrá alcanzar la areté

La esencia de la amistad.

Las presentes, son dos cartas reflexivas, escritas hace dos años y dedicadas a su vez a dos de mis mejores amigos de adolescencia, en donde se da cuenta en parte de qué entendía por amistad en aquel entonces y en sí la esencia de ésta, que se desprenden de su escritura. 1º: Amigo Pablo: Te dedico una nota existencial en honor a tu cumple años, te estimo mucho y creo que eres uno de los pocos amigos de verdad que he podido encontrar en los intrincados caminos de esta vida, he aprendido muchas cosas de ti y espero que tú también, he aprendido a valorar cada instante que hemos compartido, tanto aquellos momentos de dicha y gozo, como aquellos otros no tan gratos. Espero que pese a los reveses del destino, nuestra amistad perdure, puesto que soy fiel partidario que una verdadera amistad es capaz de traspasar las barreras del inexorable tiempo y más aún, capaz de trascender las fronteras de la distancia. Quizás no he tenido oportunidades para decírtelo antes, pero creo que no siempre

Es hombre y viejo.

Una tristeza hambrienta y Un viaje lejano y usurpado por Una triste hambre y Un viajero y su prado o Un triste hombre y Un viaje pardo o Tres hombres y un viajero ardor Es hombre y viajero Es hombre y viejo.

La maja desnuda.

Son las contraluces mágicas que anudan Y desnudan tu corazón La luz es la contramagia que anuda Y desnuda tu razón A contraluz la magia anuda Y desnuda tu son Contra la luz mágica unida Y desunida son La luz mágica de su unidad son Luzca maja desnuda o Luzca amada y desnuda Luz maja y desnuda La maja desnuda.

Sueños irreales de infancia.

Éste fue uno de los sueños que más me ha marcado en el transcurso de mi vida, aconteció en una noche como cualquier otra en mi casa de Santiago. En aquel entonces tenía 13 años y cursaba séptimo básico; aquella oportunidad me dormí como de costumbre, pero de un momento a otro desperté en plena penumbra, me encontraba en mi habitación, en la cual me había dormido, aún era de noche, todo me parecía normal, pero de pronto me traspasó un miedo irreconocible, no sabía por qué me sentía así, me intenté mover, pero no logré hacerlo, quise dar un grito a mis padres para que acudieran a mi dormitorio, pero tampoco lo logré, de repente mi vista se focalizó en el extremo de mi habitación, ahí había una cortina que simulaba una puerta, puesto que mis padres habían decidido expandir mi cuarto. Pero algo inopinado sucedió, algo movió aquella cortina, de pronto atisbé a un ser luminoso que traspasaba el umbral de la cortina, me entró un pánico inefable, no sabía qué hacer, intenté gritar nuevament

Dime con quién andas y te diré quién eres.

Cada oveja con su pareja Cada rebaño con su pastor Cada hombre con su mujer Cada mujer con su hombre Cada hombre con su hombre Cada mujer con su mujer Los poetas con los poetas Los poetastros con los sinvergüenzas Los trastos con vergüenza Los trastos convergen Trastos ven Tras ven, ven tras Travestís con travestis Dime solo, sólo dime Dime, sólo dime Dime con quién andas y te diré quién eres.

El anfiteatro electrónico de mis versos.

Una pérdida cambia la vida Un instante cambia tu mirada La frustración adormece la libertad Las personas cambian, la identidad cambia Todo cambia, mas nuestras esencias se quedan estáticas Uno junto al otro nos quedamos Aunque el tiempo nos separe y la vida nos engañe Aunque creas olvidarme, me tendrás presente Aunque pierdas la memoria, rondaré tu subconsciente Aunque creas que me odias, me estarás amando El amor es un arte y tú me lo demostraste Has sido artesan @ de mis sueños, ideales Y has sellado tu promesa con un beso En el anfiteatro electrónico de mis versos En las luces y sombras de mis pensamientos En el juego de cámara de mis sentimientos Así será hasta el fin de los tiempos.

Almas aprisionad@s.

Espejos quebradizos alumbran la noche Iluminan despacio los espacios del tiempo Que brillan azulados reflejándose en tus ojos Los ojos de tu alma, imaginaria, triste y melancólica Tu cuerpo se desvanece en mis manos Se tambalea multiforme en mis pensamientos Que te llevan y elevan en el cielo, nuestro cielo Amores olvidados, polvo terrenal y palabras opacas Eso eres tú, mujer-hombre, mas qué importa Sólo eres tú, hech@ a imagen de tu Dios Tu dios es sólo tuyo, único, irreverente y piadoso Eres una máscara de ensueño, una mujer-hombre aprisionad@ Libérate, no dejes que el espejo te consuma Deja que tu mente lo transforme en lo que eres En es@ que me enamoró de ti.

Los poetas muertos del cementerio general.

             Estaba atardeciendo, eran las 6:30 en punto según el reloj de pared que estaba frente a la puerta de la casa –se me hacía tarde- tenía que estar en menos de media hora en el cementerio general, era una invitación, un amigo me había dicho que nos encontraríamos allá y que iríamos a ver a nuestros queridos poetas muertos, era un homenaje no de ésos que han quedado en el olvido, donde se depositarían ramos de rosas y se leería poesía a la luz de la luna, sino más bien un tanto distinto, sin embargo, al parecer algo de eso habría, en fin, era hora de irme, los detalles ya no importaban. Tomé un libro del estante de mi dormitorio con vistas a leerlo durante el recorrido, pues en Santiago eran no pocos los tramos que duraban menos de una hora, así que tendría un largo viaje para leer, luego que dejé todo listo, tomé una linterna de mano y la guardé en el bolso, después de ello, rápidamente salí de la casa, tomé la primera micro que pasó y aproveché de leer, sin antes mirar a m

La taza rota.

Esa noche había llegado tipo diez, hacía un clima enrarecido, hacía frío, pero sentía calor, quizás no era el tiempo, tal vez era yo, no lo sabía, pero algo pasaba y si bien hasta cierto punto todo parecía normal o aparentaba serlo, algo había cambiado. Llámese intuición, dubitación o sospecha, en aquella casa a la que llegaba a dormir sucedía algo que había desestabilizado y quebrantado la rutina, no era sólo que mi mundo cambiase, sino que la realidad hasta cierto punto superaba la ficción, el tiempo ya no parecía correr a pasos agigantados, sino que incluso se detenía en estática parsimonia, para lo que sólo me bastó observar el reloj que se encontraba en la pared, en la esquina opuesta a la puerta de entrada a la casa y, efectivamente, las horas y minutos en aquel reloj no avanzaban, sino que las manecillas se habían paralizado de por vida, lo pensé unos instantes y no había explicación para ello, salvo que se hubiese quebrado, caído o algo por el estilo, en fin, lo consideré só

La mujer desconocida.

E lla es la mujer que deja huellas a su paso Que grita a los cuatro vientos su verdad Que impone su irreverencia y odio al mundo Que solloza lágrimas de rencor y amor Que se ha librado de las amarras de los hombres Que lucha contra la opresión Es la sensible mujer a la que humillaron Es la madre de tus hijos y de los míos Es el verbo hecho carne Es la sacrosanta muerte del capitalismo Es la aduladora de mentiras La virgen corrompida La silenciada por siglos La maltratada por el tiempo La viuda de la muerte La caza fortunas y la dueña de casa La que amanece trabajando Y anochece cantando La que sueña que es libre La que da su vida día a día Y que muere desconocida Como una anónima alma perdida.

El origen del lenguaje, una facultad inherente al ser humano.

“Con razón se ha considerado esta facultad como una   de las principales distinciones   entre el hombre y los animales”.   Charles Robert Darwin (1809-1882).   En el presente trabajo, se pretende aunar diversos criterios y teorías para acercarnos a una posible explicación, sobre el origen del lenguaje, entendiéndose éste, como una facultad propia del ser humano, tal cual podemos reconocer como característica, ya formulada desde Darwin, apuntada en el epitafio. Por lo tanto, al comprenderla como tal, es preciso señalar que éste ha sufrido un proceso evolutivo paulatino, en el cual se fueron sucediendo distintas etapas, con sus consecuentes características, que dieron paso a una evolución cada vez mayor, hasta llegar finalmente, a la especie actual. Por ello, es primordial periodizar sobre los distintos linajes que hicieron factible la evolución y cómo se constituyó finalmente el lenguaje, en concordancia con otros procesos evolutivos.   Es así que continuando con el planteamient

El olvido.

Olvidar no es dejar de sentir, ni amar No es el eclipse de la memoria, ni el fin de los sueños Es la muerte en vida, es la detención de tus latidos La esquizofrenia de vivir el mismo día mil veces Y no recordar el sol del amanecer La sonora lluvia del atardecer Y la luna naciente del anochecer. Olvidar es ponerle una persiana a tus ojos Es estancarse en los límites del tiempo Es caer en la fragilidad del silencio Es ser un hombre autómata Que no vive los miedos del pasado Y la incertidumbre del futuro Es la felicidad pura, el sinsentido de la vida. Olvidar es no disfrutar los momentos vividos Es ser una mujer sin caminos ni ideales Es ser un insensible hombre desapasionado El olvido… el olvido… El olvido eres tú.

Traiciones que matan.

Las traiciones matan lentamente, una a una Puñaladas frías que se hunden clavando las entrañas Dolores que profanan el cuerpo y lo saturan Atrocidades desgarradoras que humillan la carne Sórdidas melodías de una voz agonizante Muerte interior y calvario de las palabras Sufrientes desvanecimientos Sometimientos opresivos Pasividades destructoras Olvidos y llantos que abren un valle de lágrimas. Sopor y agotamiento, vano cansancio Depresiones que depredan el cuerpo Humanas lepras invasoras que te despedazan Pedazos de sueños desparramados en el suelo Vidas aniquiladas por el salvajismo Piras que incendian los sentimientos Y los golpean en tu tiempo, mi tiempo Nuestro tiempo Así será hoy y hasta el fin de los tiempos.

La incertidumbre de sus ojos.

Ella caminó y recorrió cientos de lugares antes de llegar a su lado, lo esperaba con ansias de enamorada, perdida en sus ensoñaciones, queriendo besarlo, acariciarlo, ser suya, pero sabía que no podía dar el primer paso, no porque fuera una mujer sumisa, sino que se debía a que no quería adelantarse a los sentimientos de él, pues sabía que había una atracción especial, un encanto que los vincularía de por vida, una unión indisoluble e inseparable, pero él aún estaba indeciso, su mirada lo revelaba todo, a veces cuando hablaban, él no era capaz de mirarla a los ojos, ella no entendía el por qué de aquella situación, pero con el paso del tiempo, comprendió que era la inseguridad de su enamorado, su incapacidad de ocultar lo que sentía, donde sólo bastaría ver sus ojos para que se entreviese la loca pasión y amor de una juventud a flor de piel, de fuego candente que ardía desde la profundidad de su corazón hecho llamas y que poseía una irrefrenable irreverencia que, sin embargo, no pod

El siglo XXI es la muerte de la filosofía.

Tú que fuiste filósofo y pensaste sobre la belleza de la vida Tú que amaste el conocimiento y que hoy te arrepientes No te olvides de la memoria colectiva y el sinsentido de nuestro tiempo Recuerda que aun en esta vida ajetreada y de librepensamiento Tu sabiduría muere día a día Y como el sol desfalleces en el crepúsculo Y ansías renacer en una noche estrellada Donde las almas humanas tengan tiempo, paciencia y sueños No rutinas, exasperaciones y conformismos ¡OH! Condenado siglo del filósofo-poeta del pesimismo Cuánto los lastimas, reniegas y discriminas ¡OH! Humana sociedad, ¿a qué aspiras? Tus aspiraciones son sólo vanas mentiras Que se desvanecen como las palabras en el aire Que se engarzan a la poesía de la vida Y se derrumban en la babilonia de tus días ¡OH filósofo! No dejes de pensar y amar Enamórate y rencántate de tu patria, de tu tierra y humanidad Sé libre y vuela alto, sé inconforme Sé idealista y nada contra la corriente materialista.

Una noche de aquéllas.

Faltando sólo un cuarto de hora para las diez de la noche, pensaba mil veces las 1001 cosas que quería hacer, dónde, con qué y cómo debía ir; lo primero fue ponerme la ropa para esa noche especial, una mezcla entre sensualidad y seriedad, una camisa descotada con dos botones abiertos, unos jeans ajustados y una boina plomiza que resaltara el –atrévete a dar un paso más, pero con cuidado- estaba listo, sólo debía comprar el regalo, que no podía dejar de darle un toque de emotividad, pero sin el típico sentimentalismo barato, agregándole un deje de intelectualismo, por ello obviamente el regalo perfecto era un libro, por consiguiente, me dirigí a la librería más cercana de donde vivía actualmente. La librería Antártica era un lugar que había visitado cientos de veces, siempre encontraba un libro nuevo, una edición empastada que me cautivara, que llamara mi atención, pero aquella noche no fue sólo eso. Entré, miré de reojo a mi alrededor, igualmente me acerqué a las estanterías, revisé