Enardecido duele el quemante fuego en las entrañas. ¿Corazones rotos aman sin razón? Es el amor la contradicción de los amantes. ¿Con razón ama un roto corazón? Es la confianza quebrantada el hilo de plata de Ariadna. Solo la palabra sincera es verdad para quien se entrega sin pensar.
El monte parnaso es el olimpo de los simbolistas No soy iconoclasta ni falso adorador de egolatrías Enamórate de la soleada claridad del día Invierte el tiempo, traspasa generaciones Sumérgete en la torre de marfil, lee, escucha y escribe lo que ves No te calles, lo peor que puedes hacer es silenciarte Tan sólo entra y serás bienvenido en mi torre de marfil No preguntes por mi nombre, ya lo sabrás de antemano Sólo sé tú, sigue tu camino y me encontrarás, si me estás buscando.