Volcánica inspiración como tormentosa oscuridad renuente de posibilidades de amor Es el calor de tu cuerpo sobre las aguas de mi vorágine infinita En las sensaciones más intensas de tu humanidad deseosa entre mis dedos Abiertas de par en par se esfuman al viento las palabras del deseo Inventan placeres, amores de olvido en el paraíso perdido de tu inusual silueta Reflejo de imaginerías trashumantes en los tiempos del cólera Vestigios y remansos de agua brava en tu hombría virginal Somos huracán, contornos claroscuros en los vaivenes del amor Ocultos en las sombras de nuestros éxtasis bíblicos Desafiamos el infierno y crucificamos el paraíso Seremos uno, licor de almíbar en el paladar de besos de ilusión Amantes errantes en las eternas horas del mañana Hasta que tu boca pronuncie mi nombre y mis labios desaten tu amor. Chillán, 10 septiembre 2017.
El monte parnaso es el olimpo de los simbolistas No soy iconoclasta ni falso adorador de egolatrías Enamórate de la soleada claridad del día Invierte el tiempo, traspasa generaciones Sumérgete en la torre de marfil, lee, escucha y escribe lo que ves No te calles, lo peor que puedes hacer es silenciarte Tan sólo entra y serás bienvenido en mi torre de marfil No preguntes por mi nombre, ya lo sabrás de antemano Sólo sé tú, sigue tu camino y me encontrarás, si me estás buscando.