Recorrer confines, sobrevolar el terruño propio más allá de tus sentidos Volverse ángel entre nubes de caricias que conducen al paraíso Ser un ave con sus alas desplegadas al viento en busca de libertad Perderse entre los vuelos, cual Ícaro caer a las garras de los mares del averno Instar silencios, callar verdades, resolver enigmas como misterios inconclusos Emprender un viaje, amar las raíces y alcanzar el cenit de un atardecer Mirar de punta a cabo las aguas infinitas de un mundo derrumbado en penumbras Convertir los estertores de un paisaje en clarividentes arcoiris de ensueño Imaginar poemas como soles en el fulgor de un pensamiento Ser tú mismo, sin importar prejuicios de sociedades eclipsadas en olvidos. José Patricio Chamorro Jara. Copiapó, 5 mayo 2018
El monte parnaso es el olimpo de los simbolistas No soy iconoclasta ni falso adorador de egolatrías Enamórate de la soleada claridad del día Invierte el tiempo, traspasa generaciones Sumérgete en la torre de marfil, lee, escucha y escribe lo que ves No te calles, lo peor que puedes hacer es silenciarte Tan sólo entra y serás bienvenido en mi torre de marfil No preguntes por mi nombre, ya lo sabrás de antemano Sólo sé tú, sigue tu camino y me encontrarás, si me estás buscando.