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Carta a un extraño.


Carta a un extraño:

He pensado las mil y una formas de comenzar esta carta, sin embargo, ninguna dá en el clavo en sentimientos y contrariedades. De lo único que tengo certeza es de que lo amé. Con el tiempo he comprendido que no existe solo una forma de amar y/o demostrarlo, por el contrario de lo que nos suelen vender los libros de autoayuda emocional. El amor se siente en cada acto y vivencias compartidas por aquella persona que dió por ti, más de lo que ha dado por otros o por los que incluso uno brindó tiempo, desvelos y angustias. No obstante, quién ama no piensa en aquello como un afecto al que se debe entregar recíproca devoción; más bien sabe que él con su amor transforma, libera y los momentos junto aquel ser amado se eternizan en la memoria de los años.

Sé que al mirar al pasado, nos damos cuenta al fin a quién tuvimos a nuestro lado y aunque una relación amorosa llegue a su término, la felicidad, por muy evanescente que haya sido, aunque durase un día, una hora o un instante, valdrá la pena haberla vivido. Somos seres destinados a amar, por ello nos encontramos en búsqueda permantente. Sin embargo, las más de las veces solo nos quedamos con las sombras de la luz que irradia amor.

Esta carta es una invitación a amar, no por satisfacer meramente las necesidades de la carne, sino que sobretodo por trascender a través del otro, sublimar el sentimiento de amor a un estado de plena consciencia y bienestar. El amor jamás daña, sino nunca fue amor. Es en estado puro la esencia de sí mismo, que ni las palabras más precisas, jamás lograrán describir. Es un magnetismo que se percibe en el ambiente, en las miradas cómplices, en la caricias, en el estar aun en la distancia física y en el recuerdo; por ello quiénes han amado, incluso más allá de la muerte, ese sentimiento permanece, porque no es el ser físico lo que se amó, sino su ser íntegro, en el aspecto emocional, espiritual y en el plano terrenal.

Solo el amor sana las penas de amor; pues quién amó, sabrá reconocer la sinceridad del sentimiento en el otro, cuando ese sentir se haga presente.

José Patricio Chamorro.
Copiapó, 29 febrero 2020.

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