Decidir es contemplarse a sí mismo en un espejismo de
ilusiones rotas;
Desenmascararse de la frágil memoria de los recuerdos ayer
olvidados.
Ser abismo, muerte vivida en la contemplación infinita de
las horas;
Marioneta del destino, presagio oculto de constelaciones
milenarias.
Partícula atómica en el cosmos, frágil silueta en marañas
laberínticas
Absurda presunción de un ángel caído en las garras de la
tierra;
Atraído, absorto y despojado de sus alas, cayendo en mortal
espera.
Dolor entrañable, desgarrador tiempo provisorio de lo que se
amó.
Copiapó, 12 de
noviembre del 2025.
No hay comentarios:
Publicar un comentario