El tic-tac del reloj embarga mis sentidos
Atraviesa los poros de mi cuerpo, penetra mis latidos
Mi mente divaga en recuerdos de otras noches, de otros días
Días que van y que vienen, todos se eclipsan en mi interior
Siento los placeres prohibidos de mi cuerpo
Las caricias de amantes errantes que se cobijaron en mí
Siento sus latidos, su palpitar, sus besos y risas
Horas de intensa pasión, segundos que se desvanecen
Los amantes van y vienen, los recuerdos quedan
La memoria no es frágil, es un abismo de historias
Historias que te acompañan en la soledad de la vida
La vida es un sueño de una noche
La noche es la sin-razón del fuego interior.
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