La amistad es para algunos el compartir y apoyarse mutuamente frente a las adversidades y gratos momentos de nuestras vidas; para otros es simplemente un lazo que los une y que es muy fuerte pero frágil a la vez. Es decir, es tan valioso y resistente como el oro, pero en momentos de incertidumbre puede ser frágil y leve como suspiro de lluvia frente a la inmensidad del mar... Aquella noche de lluvia Pedro iba rápidamente calles tras calles desoladas camino a su casa, pero la borrasca no cesaba, más aún el viento y lluvia embestían con fuerzas a todo aquello que estuviese bajo las penumbras de la noche. Intentó buscar un refugio, pero no atisbó ninguno, mas no obstante, apresuró su caminar. Finalmente se topó con una plaza a la que se dirigió a pasos furtivos; estando en ella se resguardó bajo un árbol, esperando que la tormenta se apaciguara, mientras estaba a la espera comenzó a meditar en lo extenuante que había sido todo aquel día, en ese instante escucha sollozar la voz
El monte parnaso es el olimpo de los simbolistas No soy iconoclasta ni falso adorador de egolatrías Enamórate de la soleada claridad del día Invierte el tiempo, traspasa generaciones Sumérgete en la torre de marfil, lee, escucha y escribe lo que ves No te calles, lo peor que puedes hacer es silenciarte Tan sólo entra y serás bienvenido en mi torre de marfil No preguntes por mi nombre, ya lo sabrás de antemano Sólo sé tú, sigue tu camino y me encontrarás, si me estás buscando.