Las traiciones matan lentamente, una a una Puñaladas frías que se hunden clavando las entrañas Dolores que profanan el cuerpo y lo saturan Atrocidades desgarradoras que humillan la carne Sórdidas melodías de una voz agonizante Muerte interior y calvario de las palabras Sufrientes desvanecimientos Sometimientos opresivos Pasividades destructoras Olvidos y llantos que abren un valle de lágrimas. Sopor y agotamiento, vano cansancio Depresiones que depredan el cuerpo Humanas lepras invasoras que te despedazan Pedazos de sueños desparramados en el suelo Vidas aniquiladas por el salvajismo Piras que incendian los sentimientos Y los golpean en tu tiempo, mi tiempo Nuestro tiempo Así será hoy y hasta el fin de los tiempos.
El monte parnaso es el olimpo de los simbolistas No soy iconoclasta ni falso adorador de egolatrías Enamórate de la soleada claridad del día Invierte el tiempo, traspasa generaciones Sumérgete en la torre de marfil, lee, escucha y escribe lo que ves No te calles, lo peor que puedes hacer es silenciarte Tan sólo entra y serás bienvenido en mi torre de marfil No preguntes por mi nombre, ya lo sabrás de antemano Sólo sé tú, sigue tu camino y me encontrarás, si me estás buscando.