Reflexión personal: El poema La higuera de la escritora uruguaya, Juana de Ibarbouru nos permite reflexionar desde múltiples perspectivas, por ejemplo, desde la mirada del afecto y la empatía, desde la inclusión o inclusive, desde la diferencia: “En mi quinta hay cien árboles bellos, ciruelos redondos, limoneros rectos y naranjos de brotes lustrosos. En las primaveras, todos ellos se cubren de flores en torno a la higuera” (Ibarbourou, 1922). Si bien, a primera vista cada uno de los árboles pareciese resaltar su belleza en primavera, siendo únicamente la higuera quién no se viste de colores, es precisamente aquella diferencia como veremos más adelante, lo que crea su propia resistencia y fortaleza frente a la adversidad. La personificación de la higuera como una planta sintiente que podría ser capaz de comprender las palabras de la hablante, nos lleva a pensar figuradamente en nuestros estudiantes en el marco de un contexto educat
El monte parnaso es el olimpo de los simbolistas No soy iconoclasta ni falso adorador de egolatrías Enamórate de la soleada claridad del día Invierte el tiempo, traspasa generaciones Sumérgete en la torre de marfil, lee, escucha y escribe lo que ves No te calles, lo peor que puedes hacer es silenciarte Tan sólo entra y serás bienvenido en mi torre de marfil No preguntes por mi nombre, ya lo sabrás de antemano Sólo sé tú, sigue tu camino y me encontrarás, si me estás buscando.