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Mostrando entradas de 2017

Ultimátum al silencio.

Las horas pisan sus talones encontrándose al pasar Se balancean raudas, fugaces al ritmo de fin de año Intermitentes, suaves, sonoras como vientos del sur Buscan, olvidan, retroceden y resignifican añoranzas Al descubierto se mudan otoños como sucesivos inviernos Apacibles las palabras esperan tu andar figurando sentimientos. Festejan la vida en sus ires y venires de las manecillas del reloj Destienden el pasado en recuerdos mudos, inamovibles La memoria hace su entrada triunfal y despierta de su ensueño Te saluda como un viejo amigo a su camarada de guerra Solo ella sabe cuánto ha sufrido el corazón marchito. Desahucia despavorido un grito al silencio, la muerte acecha  Somos mortales como humus bajo las catacumbas del averno La realidad solo es una, nacemos para morir sin tregua Vivir es remontar azares e infructuosas búsquedas Ni suspiros, ni caricias en amantes brazos aguardan al amor Es luctuoso final, a quién

Posibilidades inconclusas.

Ocho meses exactos en los que  tu antebrazo rozó el pasamanos del autobús en que subí con ilusión desbocada en una tarde de diciembre. Días antes te había visto sin saber que habíamos recorrido los mismos lugares sin encontrarnos. Hace 5 meses y siete días fuiste a ver la película que tanto ansié y aunque estuvimos en la misma fila, quedamos en asientos opuestos y solo te vi de lejos, sin saber que un día me amarías.  Fue en abril del año entrante en que leí versos con sabor a traición de amor, ese mismo mes una lectura no alcanzó a ser escuchada y tus ojos aún no se entrevistarían con los míos. Pero ese día el reloj marcó las siete en punto y tu presencia tensó la atmósfera. Aquella tarde, nada fue igual. Tu voz, tus ojos que me encontraron por vez primera jamás volverían a ser los mismos y la  soledad acariciante y murmurante de mis veintitantos solo serían un recuerdo amargo por lo que no fuimos y que en ese instante se desvaneció.  José Patricio Chamorro Chillán, 30 d

Versos imaginados

Amar la palabra como ecos del silencio Desafiar la carne y verter las ilusiones Desterrar abismos contra la juventud dorada Emancipar el ego, acurrucularlo en el olvido Mirar al vacío como quién devora un pastel de cumpleaños Arrancar una silueta, asombrar su memoria en pensamientos Cortar girasoles, hacerlos volar en el poema Descrear imágenes, deconstruir sonidos Gustar el verano, dulcificar el invierno Desmalezar primaveras y plantar árboles en otoño Sembrar palabras como semillas en camposanto Pavimentar ciudades con versos imaginados José Patricio Chamorro Jara Chillán,  12 diciembre 2017

Poesía noctámbula.

Poesía noctámbula. marzo 06, 2011            Reedición: 5 diciembre 2017 Hoy la noche se me presenta cautivadora, tentadora Una musa cuyas sinuosas curvas me llama Exhala deseo y me fulmina con el hálito de su mirada Proclama a gritos furtivos que la posea Que la haga suspirar como el amante al que nunca podrá olvidar Aquél que la poseyó, que conquistó su alma Efluvios emanan fragancias aterciopeladas                              Delirios extenuantes en su lecho de ámbar -o- Es la noche amor apasionado, frenesí Reflexión propicia, pliegues de calma, tempestad Anhelante espera, impaciente mi estocada Un impulso impetuoso Que no cesará hasta pernoctar en el placer poético de una caricia Que le arrebate hasta el más escurridizo de los besos Y quede postrada en un rincón de mi cama.

Cenizas de pasión. (Reedición 5 diciembre 2017)

I Dolidas están las entrañas del corazón desdichado Mis ojos se agazapan ante la vana muerte y esperanzas de amor Ilusiones perdidas en un cementerio de lágrimas Desfallecen desterradas cual expatriado sin perdón Hubiésemos sido felices, sin embargo, Una muralla traslúcida y marmórea nos separó. II Te miro a los ojos y siento el frío penetrante de una gélida mirada Aborreces mis palabras, me hundo en un valle de lágrimas Sufro, padezco estragos cuando mi compañía rechazas Me pregunto, ¿será tan cruel la agonía? Su calor quema como flama destemplada y calcinante Hasta derretir cada centésima de mi ser  Ígnea, incinera la piadosa existencia de lo que fue y pudo ser. III Épicos sones medievales acompañan mi desolación Mas quisiera no vivir de recuerdos, sino de vívidos momentos No obstante, nuestras memorias se desvanecen tenuemente Cual etéreo gozo primaveral de la primera juventud Suspiramos juntos y hoy conspiramos en un desam

Encrucijados cruces de crucifixiones

Sutilezas retóricas, cementerio de ensueño Cortacianas palabras balanza Sombras enigmáticas Cultismos añejos Añejados cultivos Huerta de la sabiduría Savia nutricia Hidromiel de los dioses Orgiásticas bebidas Tabaco y pipa con sabor acaramelado Argentina hierba mate matutina Culmina la vida en  inmortal vicio En  salubres resinas renace Dicha desemboca en salud y gloria vespertina. Reedición: 5 diciembre 2017

Existencialismo a la vena

Escribo con el sentimiento que invade mi razón pura De noche mitigo los dolores en la sordidez del silencio En las mañanas destemplo el porvenir que deshojo Atardece como otoño entristecido entre mis venas Uno a uno se desposan los lirios y las rosas en primavera El sufrimiento es tortura que palidece la agonía existencial Me cuestiono, me atormento y acribillo en sentencias vagas Un sí rotundo es lo impropio de mi carne muerta Una negación absoluta es la redención a mi alma en sopores dormida El paraíso es un bufón de circo pobre que promete eternidades rotas Corazón es el ilusionista, mago de sueños inconclusos al pasar Mentiroso y procaz como el fuego de tus manos al rozar su mejilla La virgen, atávica te observa, sabe lo que escondes en tu desnudez Sangre recorre abismante tu torso desnudo de predicamentos Un hilo de plata sorbe los besos añejados en remotas épocas Succiona el lácteo pecho tu pestilente boca de soberbia y bondad Aguijona tu dedo índ

Una mirada crítica a la formación de audiencias en la nueva región de Ñuble: Hacia una propuesta de intervención cultural.

¿A qué se debe la baja audiencia en los eventos culturales y literarios de la región?, ¿Por qué es necesaria la formación de audiencias en la nueva región de Ñuble? Sin lugar a dudas la literatura forma parte del patrimonio cultural y social de una comunidad y territorio. Es por tanto, imprescindible abogar por su desarrollo para mantener viva la memoria histórica de los pueblos y construir consciencia crítica sobre la realidad. Al plantearnos el por qué de la baja audiencia ante las actividades culturales y literarias, resaltan en igual medida otras preguntas fundamentales; ¿Todos tienen acceso a la cultura?, ¿Cuáles son los principales problemas que dificultan la igualdad de acceso? Y ¿Qué esfuerzos se han llevado a cabo para resolver las problemáticas emergentes?  Al respecto, se vuelve necesario interpelar a quiénes han hecho de la palabra su oficio (Escritores, gestores culturales, periodistas y artistas en general), pues tienen el deber de posibilitar el desarrollo del ca

Cuerpos resentidos (Reedición)

(Poesía de madrugada) Original: Febrero 2016 Reeditado 20 noviembre 2017 Palabras echadas al olvido sin prejuicios del mañana, escribir Soltar la mano, arremeter la escritura Encarar el pasado, sostener los pensamientos Ser libre a través de sueños y palabras, ausentes de pecado universal Buscar nuevas y reinventar las viejas ilusiones Sentirse artista y humanizar el arte, Escribir sin fin, por un mañana transitorio en la memoria ¿Ser recordado? Una ilusión baladí, trivial como un orgasmo La medianoche es el lugar perfecto para ti y para mí Es el momento climático de nuestros cuerpos Amatorios entresijos son mis versos hechos carne Resentir el noctámbulo fin de nuestros cuerpos, amar de madruga Desear la muerte como se desea un beso tuyo Renacer al siguiente día como un cristo de las catacumbas Corrupto en el santísimo sacrificio por la humanidad perdida José Chamorro

Nostalgia ahogada. (2 febrero 2014)

La impotencia de existir. Siento una pena que me carcome desde las entrañas, es vivir en contradicción, es un llanto que me ahoga por dentro, es el insoportable malestar de vivir y convivir junto a otros, el recibir órdenes como si tuvieses una incapacidad para pensar por tu cuenta. No me gusta que piensen por mí, controlo mis pensamientos y mi vida, no se las dejo en las manos de otros, ésa es la gran diferencia. Algunos han dicho que se debe a una seriedad intelectual, a un formalismo endémico, pero es y ha sido la forma de ser que me caracteriza, amo a mis seres queridos, a mi núcleo más cercano, pero quién escribe necesita un tiempo de aislamiento, para cultivar las ideas propias y si quiénes te rodean en el día a día no comprenden aquello, quizás la mejor decisión es apartarse, estar lejos de los tuyos por el tiempo, por el simple hecho de no verlos. El amor es un sentimiento trágico para algunos, que nace de un sentimiento incondicional. A ratos no tolero la convivencia. Mi

Nostalgia me invades traicionera

Recuerdos de los años ya pasados, traes a la memoria Marchitos están en la frágil sentencia del olvido Pensamientos van y vienen buscando quedarse Los retengo un instante y los dejo partir Vuelvo a ellos como si fuese ayer, los hago vida Imágenes agolpan mi escritura y se pierde en tus avenidas Nada queda, solo resistir y retener el primer momento Esos sentimientos del primer amor, de su sonrisa, de lo que fue Nada permanece, es la vida un sueño al abismo Una ilusión baladí en tu hondura viril de hombre al despertar Eres la ironía de saber que la vida fue sabia y nos apartó Que te dejó ir para que fuese libre en tus silencios Tus manos y tu cuerpo refrescan mi humanidad, presa de ti Se esconden mis lágrimas en tu mejilla rogando verte una vez más A la espera aguardo el beso que nos debemos insinuante Te deseo como amantes no declarados de nuestra juventud José Patricio Chamorro, 12 noviembre 2017, Chillán

Hombre frente a la ciudad.

Siento una mirada a la distancia, unos ojos que me observan fijamente como inquiriendo que yo también sé su secreto. Ambos nos conocemos muy bien. Lleva varias semanas asomándose a los límites del edificio frente a los almacenes Corona, donde he sobrellevado mi aciaga existencia los últimos meses,  soportando las estridencias de la ciudad a diario, sin poder salir. Él desvía la mirada, al igual que las mujeres que hace unos momentos observaban mi vestido floreado de encajes. Ellas se van, buscan un lugar más a la moda. Lo miro de reojo. Lo veo de espaldas mirando a los cielos. Alza sus manos al aire y las deja caer. Él sabe que conozco su secreto. Quiénes no somos de este mundo nos reconocemos. Su hora está por llegar. Se desploma su cuerpo en el pavimento de la ciudad. Quince pisos no bastaron para mermar su tristeza. Mismo sentimiento que invade mi gesto artificial. Taller Literario "Cuentos de bolsillo". Biblioteca Municipal de Chillán. 2 noviembre 2017.

Deseos.

Esta tarde me he sentido deseada. Varios ojos se han posado en mí. Siento cómo observan cada detalle de mi silueta y cómo sus ojos miran con envidia mi talle cuasi natural. La ciudad pasa frenética frente al abismo que nos separa. Cuántas veces he soñado con atravesar el cristal, tocar mis propias prendas y vestir a la moda como  ellas, pero la fortuna es ciega. Ellas envidian mis encajes de alta costura, mi sombrero de plumas, mi cabello rizado o atrevido escote. Lo sé, porque las puedo oír. Pero lo que no saben es que en realidad soy yo quién las envidia a ellas; su grácil caminar, sus mejillas sonrosadas, sus labios color pasión y risueñas sonrisas, ¡Ay, si solo pudiese sonreír! Pero la mueca perfecta y el pulcro vestir hasta agotar stock son el destino de los maniquíes de escaparate. Taller Literario,  "Cuentos de Bolsillo". Biblioteca Municipal de Chillán. 2 noviembre 2017.

Día de los muertos.

Día de los muertos. Soledad el día de los muertos como alma en pena, llueve Cae la noche al vacío y se despiertan rumores lejanos Sisean, trastabillan, se levantan y tropiezan los silencios Morir es sobrellevar culpas y remorder el pasado Ser mártir en la rutinaria indiferencia de quién lleva a cuestas el peso del mundo Verdugo de sueños aportillados en la memoria calcinada Agonía inescrutable de quiénes se saben hechos para la muerte Cuerpos olvidados en rescoldos intermitentes de la cansina humanidad Se desvelan en aguaceros las palabras oprimidas Se precipita en diluvio universal la placentera nostalgia de las horas Quietud es el alud que nos aguarda Sonríe desdeñosa la mujer con su guadaña 31 octubre 2017. Chillán José Patricio Chamorro.

Temor sombrío. (28 octubre 2016)

“El amor no prospera en corazones que se amedrentan de las sombras”.William Shakespeare. Temor sombrío. Los días se suicidan hacia el final de la jornada al perderse tu presencia Se visten de atavíos solemnes para esta ceremonia de verte partir El corazón de los lunes se agita en la ansiedad inminente de tu llegada Los martes extienden sus brazos a tu corporeidad infinita que llena el vacío Los miércoles son la antesala de mis desdichas, la nostalgia de saberte un instante Los jueves desfallecen en misericordias destempladas en horizontes agónicos de melancolía El mal mentado viernes es el inicio del fin del holocausto en que me sumerges La llegada del sábado resplandece como un crepúsculo desvanecido de atardeceres El domingo es la muerte inminente de los días que se consumen en ausencias Mueren lentamente en parsimoniosa quietud como estatua marmolada Es el lirio quebrantado de los jardines del amor. José Patricio Chamorro, 28 octubre 2016.

Esencia de té. (14 /6/2012)

Las palabras acallan mis oídos El silencio mis latidos paraliza Acicalan mi cuerpo tus finas manos  Sentada frente a mí te contemplo Bebemos un té de madrugada Recordamos viejos tiempos Nos desquebrajamos  Me besas, te correspondo C A E    UNA… G                  O                  T                 A                     Se esparce su silueta por el suelo La observas, me miras, sigues bebiendo Eres única, tu alma es pureza virginal Tu esencia es como una taza de té al amanecer.

Síntomas nocturnos.

Es el momento un hálito que nos posee Rescoldo de vida en el vagar de nuestros pasos Búsquedas, pensamientos son síntomas de la humana certeza Respiro inminente es la muerte  en la soledad de las horas El tiempo, raudo, pasa fugaz como un suspiro Hablan las noches en el ocaso de tu silueta Sonríe tu boca en el despertar del amor. Tocan tus manos el éxtasis de la carne Sintonizan tus latidos los ecos del recuerdo Sientes, callas, enmudeces en la palidez del silencio Eres enfermedad postrada en las vitales catacumbas Se abren a tu andar como capullos en primavera Anuncian  aciagas horas los besos de juventud. Regresas y te pierdes en palabras a destiempo Amas con locura la insensatez de otros amantes En tus brazos duerme la agonía de sus misterios Sus besos acarician tu mejilla y te sonrojas al recordar. Presiento tu piel en sábanas nocturnas Vacío es el despertar del día El sentimiento es mi mayor tortura Nostalgia el vano veneno del enamo

Éxtasis.

En sus días de olvido la vida es breve Se escurren fugaces y placenteras las horas Extrañar es una certera declaración de amor Sentir la lejanía y rozar los recuerdos Infinita es la distancia inseparable de los cuerpos Cobarde el corazón que insinúa sentimientos Profana los momentos tu boca fugitiva Resuenan misteriosas las aguas del paraíso.  Besos prófugos como amantes nocturnos Amo tus silencios, la melodía de tu piel Te deseo, te acaricio en sueños diurnos de madrugada Eres el espejo del romántico encuentro La imagen delineada de amorosos suspiros Tu humanidad es éxtasis místico. Tu palabra es cadencia sonora Ingrávida promesa de amor incumplida Pensamientos, risas y memorias La escritura es verso ensangrentado Pasión mordaz en el pecado de la carne.      8 octubre 2017, Chillán.      José Patricio Chamorro.

Capullos en flor. (Poema completo)

Capullos en flor. (Poema completo) Las nubes deambulan como tu silueta entre mis dedos Nuestras manos acarician el rocío  Penetran los sentidos los aromos perfumados Canto la alegría, lloro la tristeza de los días Melancolía es el sentir que nos invade Es Noche el dulzor que degusta tu boca Abre primavera tus capullos en flor. Los nubarrones pueblan tu rostro sereno Frágil es ante la intemperie del pensamiento ausente Perturbadora mirada es la soledad que nos aguarda Tus ojos esperan en cómplices silencios El color de las rosas palidece en monocromías Octubre es el mes de los callados besos Amantes nocturnos ocultan su deseo en primavera Se abren en flor los capullos rojos. En vals danzan pétalos deshojados Se abren y cierran como en éxtasis tu cuerpo Pasmosas catarsis provocan en la tierra Sinuosas curvas agrietan los torreones Cataclismos estertóreos rozan tu piel  Inundan los valles tormentas de pasión Pétalos

Pétalos en vals.

En vals danzan pétalos deshojados Se abren y cierran como en éxtasis tu cuerpo Pasmosas catarsis provocan en la tierra  Sinuosas curvas agrietan los torreones Cataclismos estertóreos rozan tu piel  Inundan los valles tormentas de pasión Pétalos caen de los capullos en flor. José Patricio Chamorro, Chillán, 7 octubre 2017.

Nubarrones de primavera.

Los nubarrones pueblan tu rostro sereno Frágil es ante la intemperie del pensamiento ausente Perturbadora mirada es la soledad que nos aguarda Tus ojos esperan en cómplices silencios El color de las rosas palidece en monocromías Octubre es el mes de los callados besos Amantes nocturnos ocultan su deseo en primavera Se abren en flor los capullos rojos.

Capullos en flor.

Las nubes deambulan como tu silueta entre mis dedos Nuestras manos acarician el rocío  Penetran los sentidos los aromos perfumados Canto la alegría, lloro la tristeza de los días Melancolía es el sentir que nos invade Es Noche el dulzor que degusta tu boca Abre primavera tus capullos en flor. José Patricio Chamorro, Chillán, 7 octubre 2017.

Hilos invisibles.

“Recordé lo que tú decías. Que al pronunciar un nombre, unos hilos invisibles nos unen a la persona que nombramos”.      Contigo a la distancia, Carla Guelfenbein. P. 159. Me lo repetí tres veces, hasta grabarlo a fuego en la memoria. La primera vez tu nombre me pareció un antojadizo recuerdo de amores del pasado. Mi gran amor de adolescencia llevaba tu nombre. Habían pasado nueve años desde que no experimentaba el mismo sentimiento. La segunda vez fue cuando me esperabas en el terminal de la ciudad que años después nos cobijaría en nuestros romances de juventud. Aquella mañana caí en tus brazos para perderme en ellos y no volver. Ese día comprendí que ya nada sería igual, que nuestras vidas habían tomado un derrotero que entrecruzaría hasta el último de nuestros alientos los insondables caminos del destino. Lo nuestro estaba escrito y ambos sabíamos en la oscuridad de nuestro sentir más oculto, que nos amábamos a la distancia. La tercera vez fue de improviso. Intempestivame

El último adiós del olvido. (Reedición)

El palpitar de las hojas otoñales nos cautiva Con cautelosa parsimonia caen, se mueven y agitan Al son de nuestras pisadas se alejan etéreamente Tal nuestras emociones se han encontrado Volando grácilmente como águilas furtivas. Vuelves como el viento, Tu inconstante ausencia aguardo Como clepsidra nuestro tiempo se esfuma gota a gota Transcurridos los minutos se tornan horas Las horas, días en ausencia  Los días, años de soledad Son la juventud perdida y desvanecida de los años Férrea voluntad reserva el corazón. Recuerdos, evocación  La vida es la muerte que no nos pertenece La muerte amarga, escuálida, se extingue Es la pérfida agonía del día. Espíritus seniles proclaman su naciente amor Amor como fénix renace propagando sus ígneas llamas Resucita en cenizas ante desdichas nocturnas   A quién ha perdido el canto rejuvenece su llegada Corazones enamorados padecen la muerte de un adiós Desesperación es saber que no volveré a oír tu

Matices.

Matices. Caminar contra reloj es siempre un ejercicio interesante para poner a prueba la capacidad para llegar a un lugar en menos tiempo del estimado. Me encontraba en aquellas andanzas y cavilaciones cuando irrumpió en mi mirada un grupo de cinco amigos que disfrutaban con fruición una canción que tarareaban. En mi mente vislumbraba lejanas tierras, donde aquellos hombres libres, gozaban de las simplezas de la vida y de la naturaleza virginal al son de ritmos afrocubanos. Sentí la imposibilidad en mis ojos de ver, mi corazón interpretaba mejor que mis sentidos aquel cuadro. Mientras mis oídos se dejaban llevar por la cadencia sonora y rítmica entre risas que parecían de otro lugar, más allá de lo que podía escuchar, uno de ellos se aproximó y me hizo ser parte de aquella fiesta sin tiempo, ni espacio. Por primera vez comprendí que la maravilla son los instantes  que nos hacen humanos y que la sonrisa es la ventana al mundo. Esa tarde como una obra de arte cubierta por una tela

Esperanzas del mañana. (3 octubre 2014)

La vida es estar en pie, aun fatigado y hastiado de la rutina, de los días, de los recuerdos, de sentir que todo tiempo pasado fue mejor, de que el futuro puede ser una sorpresa inesperada, de que la vida cambia y que no va cuesta arriba, de que el tiempo avanza para hacernos más sabios y que siempre se puede aprender algo nuevo, de que la felicidad depende de lo que hagamos hoy para forjar el mañana y que aún se crea en que una idea puede cambiar el mundo, así todo parece más esperanzador y menos agraz, un poco de nostalgia y una vida para crear, atreverse a cruzar el rio, hacer lo que otros no se atreven hacer, innovador y si es necesario, diferente. Ya que ser uno mas entre una multitud y rebaño dormido, es dejarse llevar sin pastor al matadero de los humillados y ofendidos, de los silenciados, de los sin voz, de los que viven una vida de vacíos e incertidumbres y que ya no creen que el sol se esconde por el este y amanece por el oeste, no que mañana brillará el sol.       Pd:

Sentir social: versos para los poetas de mi tierra.

Sentir social: Versos para los poetas de mi tierra. Encienden como hojarasca ardiente las anárquicas letras aprisionadas Espíritu apasionado, libertario de letras y acordes de tenor involuntario Esa silenciosa música que apaga el sentir y lo enmudece,  ruido estertóreo Muerte al fratricida de las armas La codicia  enceguece al celador de las cofradías Juventud rebelde, corazones insatisfechos por escuchar su voz Gritos a intemperie, rock y pedazos de poemas en calles de agonía El luchador cotidiano desfallece en sopores de su cimiente intelectual Las manos de quién pone el lomo en el diario faenar, entremezclan la soberana libertad Como garfio fiel a los ideales de quién cree en la fé irresoluta de una convicción Pensamiento que los identifica, mentes lúcidas como farolas iluminan nuestro andar Es el cobarde callar de quién se duerme entre letanías y da la vida por ser lumbre Por ser profeta de otra tierra y cimentar versos de poetas en grietas infecundas A

El decir de las horas.

Las horas me hablan en incesante murmullo El seseante secreteo es sonoridad temporal Sonrío, me carcajeo en bufonadas tragicómicas Me miran, las miro en cómplices silencios Las toco, las apremio, las sostengo y las engullo Pausadamente las agito y las estremezco. Las horas buscan el poder, sedientas de reconocimiento Las hay, aristócratas, proletarias y de clase media Las 12 es la reina  señorial de las horas Sus súbditos reales marcan cambios de ciclo Las seis de la madruga y las seis de la tarde Las tres y las nueve son de clase media Ellas siempre cenan y almuerzan hasta hartarse Las una, dos, cuatro, cinco, siete y ocho son proletarias Ellas trabajan sin cesar, a veces juntas, otras separadas. Las compadezco, las saludo al iniciar la jornada Las ocho de la madrugada siempre me desea buen día Es amable, sincera, espontánea y madrugadora ¡Qué decir de su hermana! Ocho de la tarde es amarga como hiel Siempre la veo triste y desganada al

Inconsciencia.

La lluvia trae un grito desterrado Su mirada es mi tristeza infinita Nostalgia es la esperanza olvidada El sentimiento, soberbia Melancolía, herrumbre, podredumbre El pensamiento es sonoridad. El amor, un arma afilada Encrucijadas, abismos, placeres Inconsistencia de un murmullo silencioso Consciencia es el velo ausente. Incomprensión, audaz soledad Horas fraguadas en miseria humana Visión profética de nuevos tiempos La poesía será el canto del mañana Tu canto, el eco de la memoria. Nuestro canto anunciará el otoño La verdad de las pasiones cotidianas Locura es la razón en tus manos Huella de nuestro andar En las misteriosas tierras de la muerte.

Sonidos experimentales.

Sonidos experimentales, estridencias Mi mente es un caos contramuralla La mala suerte de saberse poeta Sociedad de ausentes Inconformismo El pensamiento es silencio Espectáculo social Fluorescentes tubos de la noche. La mirada se pierde en el vacío Horizontes de vapores olvidados Imágenes surreales Un bar es la muerte que nos observa Le sonrío como aguardando el final El vacío consume horas en insomnia perturbada Psicodelia de rock and roll Es la poesía un alarido de soledad. Pd: Escrito la noche del 29 de septiembre en un pub de Chillán, inspirado en la música de la banda Gonzáles y los asistentes. José Patricio Chamorro.

El silbido.

La noche caía sobre mis hombros, la tertulia había llegado a su fin. Caminé a la deriva, sin mirar atrás por aquellas calles tantas veces recorridas de provincianismo de viejo cuño. Pasos. Silencio. Una sombra se deja entrever bajo la luz de los faroles. Miro de reojo. Una silueta. Un sonido entrecortado roza mis oídos. Alguien silba, tararea una canción.  Pestañeo, abro y cierro los ojos. Me detengo. Mis pensamientos se detienen. Los vehículos atraviesan la ciudad de un extremo a otro, me siento desolado en medio de la oscuridad. Me encuentro solo en medio de la noche en ciernes, nadie a menos de dos cuadras, solo la sombra que se aproxima. Un aire helado recorre mi frente, apresuro el paso, lo pienso. Permanezco inmóvil. Una brizna de viento circunda mi alrededor. Miro, observo el reflejo de los árboles bajo el alumbrado. Silencio. Abro los ojos, ojalá nunca los hubiese abierto.

El poeta vitalista.

El poeta vitalista. La sangre bulle como venas abiertas en tus palabras Camarada de letras, en tu espíritu un grito ruge Voraz, destemplado, ahíto de poesía Escultor de otros tiempos en ausencia de los días La noche fue tu amante peregrina Las estrellas, constelaciones infinitas Desnuda mi alma es el refugio que aguarda tu sentir Son enérgicas quimeras  los horizontes de tu pecho Son tus labios embriagador  licor de  sentidos Deseo en caricias de lunáticas pasiones El suspirar de un arrebatado beso a la muerte. Chillán 26, septiembre 2017.

Incertidumbres. (Reedición)

Incertidumbres. Los pensamientos inconstantes deambulan a la deriva de mis versos Son mis palabras un soplo a tu canto de desconciertos melodramáticos Son los sentimientos la purga a la catarsis de ensoñaciones nocturnas Silencios y nomeolvides de una pasajera existencia Te amo y te deseo como la fría noche aguardando tus caricias Contemplo tu cuerpo frágil hecho carne, hecho vida Presiento tus latidos y tristezas en las sabanas vagabundas y lejanas Tu boca entona profecías y preámbulos de pasiones legendarias Caigo a tus pies en la incerteza de tu amor prófugo y desalmado En tus palabras frígidas como el holocausto de mentiras carcomidas Tus entrañas a ratos me saben a bilis amarga de amores idos Tu cuerpo es el ápice de una tortura irresistible Enamorarme tu mayor traición Son cadencias y pulsiones extasiantes  en orgasmos furibundos ¿Qué amas, qué deseas? Tus pensamientos son una torre imperturbable Sentimientos tormentosos que nublan mi razón Tus

Silencios cómplices.

Silencios cómplices. Nuestro andar cautiva  la cómplice  mirada del olvido Son los ojos la silueta del pensamiento sonoro La escritura es la imagen del profano sentimiento Tu actitud el eco que permanece en mi memoria. El reflejo del andar infinito es vacío inminente La palabra contrae fuerzas de herrumbre marchita Tus latidos son el compás de las enérgicas horas  del ayer El mañana la incerteza de la muerte. Vivamos el presente que nos cobija y nos ampara Nuestra última esperanza es la libertad En el mundanal ruego de la existencia maldita Es el mortal capricho de nuestra bendita humanidad. José Patricio Chamorro, 24 septiembre 2017. Pd: Creado tras la experiencia vivida en el Taller Literario Mano de Obra en Concepción.

El escritor. (Reescritura)

Cada atardecer sus manos doloridas y sus ojos extenuados se detenían en  los rayos de sol y las motas de polvo que atravesaban su ventana. Ese día el sol retrasó 3 minutos su despedida. La hora había llegado.  En su miseria agolpó su mente un pensamiento y fugaz en el murmullo quebradizo de su voz, se dejó oír como sentencia epifánica un cordial saludo: Te estaba esperando. La muerte se sacó el sombrero y sin mayor esfuerzo, como quién entierra a un amigo fraterno, se lo llevó. 21 septiembre 2017.